lunes, 23 de enero de 2012

Capitulo 3


. Por la mañana mi tía me despertó.
-Katherine, levanta. En media hora llegan los del centro comercial con tus muebles, tienes que quitar todo lo que has dejado por el suelo, si necesitas algo estoy en el salón-Dijo dándome un beso en la frente, me estiré como un gato y me levanté, comencé a recoger y en un cuarto de hora ya estaba todo metido en un par de bolsas fuera de la habitación, fui a la cocina y mientras desayunaba llegó mi tío.
-Buenos días-Dijo con una amplia sonrisa.
-Hola, ¿de dónde vienes a estas horas de la mañana?-Dije mientras le daba un bocado a la tostada que me había prepara unos minutos antes.
-Vengo del instituto, estaba hablando con el director y os ha dado una plaza a cada uno así que el día 15 de septiembre comenzáis las clases-Dijo mientras se sentaba junto a mí.
-Interesante, pues nada…a comenzar de cero-Dije, mi tío asintió y ahí se acabo la conversación. Termine de desayunar y me fui a la biblioteca a leer mientras esperaba que llegaran los del centro y colocaran mis muebles, llamaron a la puerta y mi tía fue a abrir, eran ellos, por fin. Estuvieron una hora para meter todas las cosas y después yo fui a ponerlo todo a mi gusto, los muebles eran blancos y negros y la pared la llené de fotos y posters, lo puse todo a mi gusto y guarde la ropa. Luego, llegó mi hermano y estuvo un rato conmigo en mi nueva habitación.
-Bonita tu habitación…por cierto…
-Dime, Nico
-¿Qué había en la cajita?-Dijo mi hermano muy intrigado, mis padres tenían razón, eso quiere decir que nos conocían muy bien.
-Nada interesante, solo dos colgantes y una nota que decía que nos quieren mucho y que cuide de ti-Dije revoloteándole el pelo, mi hermano me miro con cara rara.
-Ya soy mayorcito para cuidarme yo, ¿un colgante para cada uno?-Asentí mientras sacaba de una de las bolsas la cajita, la abrí y le di el colgante, el suyo era una cadena de plata con una esfera negra y por detrás ponía su nombre-¿Puedo ver el tuyo?-Me quite el colgante y se lo di-¿Para qué es la llave?
-No sé, pero lo importante es que me la dieron ellos, nada más-Dije mientras me devolvía el colgante y me lo ponía, me dio un beso y se fue. Lo que menos me gustaba en esto mundo era tener que mentirle a mi hermano pero tarde o temprano tendría que enterarse, supongo. Las últimas semanas de agosto las pase encerrada en mi habitación con el ordenador que me regalo mi tío o en le biblioteca leyendo y escuchando música, de vez en cuando me iba a dar una vuelta con mi hermano pero él no es que saliera tampoco mucho de su cuarto. Mis tíos se preocuparon así que decidieron llevarnos a la piscina municipal de la ciudad la última semana de agosto. Estuvimos desde las 12 de la mañana hasta las 6 de la tarde en la piscina, yo solía estar tumbada al sol leyendo o escuchando música y me daba un par de chapuzones con mi hermano, mi tía se quedaba en la sombra leyendo o hablando por teléfono, mi tío se quedaba en la barra del bar tomando una cerveza bien fría y mi hermano se quedaba junto a mí mientras yo leía o se iba con mi tío pero nunca quería estar solo, y eso que no es nada tímido. Pasó la primera de septiembre muy rápido, fuimos a comprar las cosas necesarias para el instituto, libretas, bolígrafos, etc. Los libros nos lo daban en clase el primera día, pasaban los día y yo estaba cada vez más nerviosa porque no me gusta tener que ser el centro de atención, la chica nueva o no conocer el ambiente, en cambio mi hermano estaba muy tranquilo, parecía como si tuviera ganas de empezar, conocer gente nueva…como no es nada tímido y se le da bien la gente, no tiene de que preocuparse. Llegó el día de ir al instituto, mi tío nos explico cómo llegar así que mi hermano y yo fuimos andando aunque estuviera un poco lejos, hicimos el camino son decir una sola palabra, Nicolás seguro que estaría pensando en que actividad extraescolar meterse este año y yo estaba tan nerviosa que en mi cabeza me imaginaba cualquier cosa. Poco después llegamos al instituto, Nico se despidió de mí con un gesto de mano y yo me quede frente a la puerta como una tonta mirando, pero no soy buena para integrarme, espero que este año haya al menos una persona que me ayude. Busque mi clase correspondiente entre y estaba llena de chavales, unos hablando con otros, cuando entre todos se me quedaron mirando, no sabía que decir así que me quede allí plantada hasta que una chica se acercó a mí.
-Hola, soy Melinda. (Ella, Melinda, es una chica con los ojos oscuros, rubia, bajita y muy delgada. Es una chica muy sonriente, tiene muchos amigos y no es nada tímida, le encanta ir de fiesta y conocer gente nueva.) Ven entra, no te quedes ahí-Dijo con una gran sonrisa, asentí y la seguí-Bueno, ¿cómo te llamas?
-Soy Katherine. No soy muy…-Intente hablar pero enseguida me cortó
-Un nombre muy bonito, es italiano ¿no?...bueno, te presento a mis amigos estos son Daiana, Ethan y Daniel.(Daiana, tiene ojos marrones y el pelo tintado de rojo, es muy alta y delgada, es muy simpática pero no es tan sonriente como Melinda, tiene unos gustos muy peculiares pero suele caer bien a todos. Ethan, chico de ojos negros y pelo moreno, es alto y corpulento, juega al futbol, es el capitán de un equipo. Daniel es un chico de ojos azul oscuro, tiene el pelo negro y algunas mechas un poco mas claras, no es muy deportivo pero se conserva muy bien, es alto, fuerte y delgado, una mezcla rara, es muy fiestero)-Todos me saludaron con una gran sonrisa, como si me conocieran de toda la vida, eso me hizo sentir mejor y se me quitaron la mayoría de los nervios que tenía.-Tu hermano es Nicolás ¿verdad?
-¿Cómo lo sabes?
-Mi padre es el director y me dijo que tres chicos nuevos entrarían este año. Una chica y un chico en segundo de bachillerato, o sea, tu y alguien y mas…y otro chico que entraba en el último curso de eso.
-¿Tu padre es el director?...vaya…
-Jajajaja, no te preocupes, no soy la típica chivata hija de papa-Dijo bromeando, en ese momento llegó el profesor junto con un chico, todos salieron corriendo y se sentaron en los sitios que habían elegido, yo me senté atrás sola…por ahora.
-Hola chicos, este es Dimitri, el chico nuevo y supongo que aquella de allí es…
-Katherine, la otra nueva-Se adelantó Melinda.
-Gracias Melinda, Dimitri siéntate junto a Katherine (Dimitri es un chico de ojos azules muy claros, pelo negro, alto, delgado y corpulento. Es un chico sonriente, le gusta el karate, escuchar música y es muy sonriente, pero cuando hay que ponerse serio, se pone. Le encanta la astrología.)-El chico asintió y caminó lento y tranquilo hasta llegar a su asiento, cuando se sentó me sonrió
-Hola, soy Dimitri…aunque ya lo sabías.-Dijo riéndose levemente
-Chicos, escuchadme. Ahora os entregare los libros y os explicare algunas de las normas. -Comenzó a hablar, el día se baso en los libros, en las normas y poco mas…muchas veces miraba a Dimitri y lo descubría mirándome. Hubo en descanso de unos 30 minutos y Melinda me propuso a ir con su gente, mejor dicho me obligo a ir con ellos, estuvieron charlando sobre el nuevo curso y todo eso, yo solamente escuchaba pero no participaba en la conversación así que me despedí de ellos y en el rato que quedaba me senté en el pasillo junto a la puerta a leer el libro que encontré en la biblioteca, estuve unos 10 minutos leyendo hasta que alguien me interrumpió.
-Hola, soy…ya te lo dije antes-Dijo Dimitri mientras se echaba a reír-¿me puedo sentar?
-Claro…adelante.
-¿Acabas de llegar a la ciudad?-Asentí-Yo también, mi madre ha encontrado aquí un trabajo y nos tuvimos que mudar.
-Ah, que guay-Dije mientras pensaba en mis padres, que ya no estaban junto a mí.
-¿Por qué estas tu aquí?
-Pues p-po-porque mis…-Empecé a llorar y salí corriendo.
-EH ESPERA-Grito Dimitri a mis espaldas, al doblar la esquina deje de correr. Fui a los baños de las chicas y me aclaré la cara y cuando me vi preparada volví a la clase. Al doblar la esquina vi que mis cosas no estaban así que entre corriendo en clase y las vi allí encima de la mesa junto a Dimitri.
-¿Dono estabas Katherine?
-mm estaba en el baño-El profesor asintió y me indico que me sentara. Llegué a mi asiento y Dimitri me recibió con una sonrisa, estuvimos las 2 horas que quedaban escuchando al profesor, como siempre había un graciosillo que soltaba la típica broma. Eran las 3 salí del instituto y vi a mi hermano.
-Katherine, que voy a comer con unos amigos, díselo a los tíos.-Asentí mientras me daba un beso en la mejilla.
-KATHERINE-Escuche que alguien gritaba mi nombre y me gire, era Dimitri que corría hacia mí-¿Qué te paso antes?
-N-n-no me apetece hablar de ello…-Dije un poco triste-Me tengo que ir a casa.
-¿Te puedo acompañar?-Asentí, volvimos a casa juntos y estuvimos todo el camino hablando, es muy simpático y alegre.
-Bueno, aquí vivo-Dije sonriéndole.
-Anda, yo vivo 4 casas más arriba. Mañana vamos juntos al instituto ¿vale?-Asentí y salió corriendo calle arriba, entre en casa y me estaba esperando mi tía con la comida preparada.
-¿Y tu hermano?
-Está comiendo con unos amigos
-Han, bueno pues guardare la comida para esta noche.-Termine de comer y me fui a mi habitación, me conecte al tuenti y toda la gente que había conocido hoy en clase me había enviado una petición, de pronto me sonó el móvil.
------------------Conversación telefónica-----------------------------
Yo: ¿Sí?
Melinda: Soy Mel, ¿Cómo va todo?
Yo:¿Cómo tienes mi numero? Todo bien gracias, ¿y tú?
M: Vi tus documentos en la mesa de mi padre y apunte tu numero, genial.
Yo: Hahn, se me olvido que era la hija del director.
M: Te llamaba para decirte que este sábado hay una fiesta para comenzar el curso, ¿vendrás?
Yo: Supongo, pero…no tengo nada que ponerme
M: No te preocupes mañana vamos de compras, dile a Dimitri que venga también.
Yo: Vale, no quiero ser indiscreta pero…¿hay algo entre tú y Daniel?
M: JAJAJAJAJ, sí. Somos pareja
Yo: Vaya, cuanto me alegro. ¿Cuánto lleváis?
M: Desde…hace medio año. Bueno mañana nos vemos, adiós.
Yo: Chau, un beso-Colgué el teléfono y de repente escucho un golpe. Voy corriendo a la cocina pero mi tía no está allí, entonces veo otra nota en la nevera <<he ido al supermercado, si necesitas algo llámame. Un beso>> Cuando vi la nota me quedé pensando que habría sido ese ruido, registré la casa de arriba abajo y no había nada, me fui a mi habitación y vi una sombra junto a mi cama, entre despacio y la sombra se giro para mirarme, estaba registrando mi cuarto, entonces de repente se convirtió en un cuerpo normal y corriente.
-¿Quién eres?
-Vengo a por algo que me pertenece.
-Yo creo que no…así que LARGATE.
-No, tienes una llave que abre una caja, que a saber donde esta…
-¿Una llave? No sé de qué me hablas
-Mira niñata no estoy para juegos, se que tienes la llave…tus padres la guardaron y una vez murieran, mejor dicho los mataran…tu tendrías que quedarte con la llave.
-¿Tu mataste a mis padres? Eres la sombra de mi cuarto y la que se alejaba del coche…serás…serás…CABRÓN.-El hombre se echó a reír.
-Ese soy yo, me llamo Tristán, mate a tus padres por la llave que tienes tu…
-YO NO TENGO NADA, cuantas veces te lo tengo que decir
-Se que estas mintiendo, como no me la des lo vas a pagar muy caro-Se acercó a mí, me cogió del cuello levantándome del suelo y me pego a la pared-Dame la llave o te mato.-Justo cuando empezó a apretar llamaron a la puerta y de repente Tristán desapareció, subí corriendo las escaleras y abrí la puerta, era Nicolás, me dio un beso y se fue a la cocina por algo de comer. Estuve encerrada en mi habitación recogiendo lo que ese tipejo me desordenó, llegó mi tía con la cena y una hora después llego mi tío de trabajar y comenzamos todos a cenar. Baje a mi habitación y me quede leyendo y luego me quedé dormida. 

3 comentarios:

  1. Un consejo, no corras tanto que te pierdes detalles ;)
    Por lo demás, creo que me he enganchado (sí, amigos, estoy leyendo en LUNES!!)
    Siguieeeente! :P

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  2. pues parece ser que el otro sia no te comente jiji pero ya te comento hoy, cuando tenga tiempo la leo tiene muy buena pinta te sigp^^ jiji

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